Al caminar por
el sendero que llamamos `vida´ nos encontramos bastantes sombras. Sombras que
interrumpen tu vista hacia la luz, te paran el camino. Cuando se juntan y se
unen, el caminante se cansa, y para… Se pregunta: ``¿Por qué seguir? Habrá mas
sombras, y para seguir y estar igual, mejor quedarme´´.
Sinceramente eso
sería lo fácil, si el sendero es largo y duro, por algún motivo será. Tenemos
la manía de pararnos, porque es lo fácil. No nos paramos a pensar que es como
un acertijo que nos da la vida; que al resolverlo nos llena tan de orgullo y satisfacción
que nos hace de seguir el camino de sombras hacia un lugar que haya luz.
Mientras tanto,
seguiremos caminando por el sendero entre sombras y una sola luz…